Nadie nos ha aclarado todavía
si la mujer de Lot fue convertida
en estatua de sal como castigo
a la curiosidad irrefrenable
y a la desobediencia solamente,
o si se dio la vuelta porque en medio
de todo aquel incendio pavoroso
ardía el corazón que más amaba.
Amalia Bautista
(La mujer de Lot y otros poemas, 1995)
2 comentarios:
Yo creo que ardía el corazón que más amaba. No creo que lo hiciese por cutiisa
Yo creo que ardía el corazón que más amaba. No creo que lo hiciese por curiosa
Publicar un comentario